Cada año las autoridades alertan de los distintos riesgos a los que se expone la población al llevar a cabo distintas prácticas que se alejan bastante de lo que los expertos entienden por práctica segura.
Y es que, ninguno de los habitantes del país podrá decir que los cuerpos y fuerzas de seguridad del estado no se preocupan de difundir a través de los distintos medios de comunicación y las redes sociales las pautas a seguir para evitar robos en viviendas durante las vacaciones de verano, timos tanto en la red como de forma presencial, y también evitar incendios durante las épocas más frías del año. “Cada año, al llegar el invierno, se multiplican los incendios en los hogares españoles. A pesar de ello, el dato correspondiente al año 2018, en el que 96 personas perdieron la vida como resultado de un incendio en su hogar, es la cifra más baja de los últimos nueve años” comentan desde Grupo Fire Madrid, especialistas en proveer todo lo necesario para evitar un incendio incluso antes de que se produzca.
Y es que, el estudio elaborado por Fundación Mapfre y la Asociación Profesional de Técnicos de Bomberos (APTB) que lleva por nombre ‘Víctimas de incendios en España 2018’ pone de manifiesto que durante el 2018 descendió la media diaria de incendios en el hogar, así como el número de intervenciones llevadas a cabo por los bomberos. Sin embargo, los responsables del estudio consideran que este descenso no ha de tomarse como un indicador de tendencia a la baja, algo que confirman los datos correspondientes al primer trimestre del año que acaba de finalizar, en el que se han contabilizado 75 víctimas mortales, el peor dato desde 2010.
Del estudio también se desprende que el 60% de las víctimas eran hombres y que el 45% de los fallecidos tenían más de 65 años. El uso de braseros y estufas, así como de chimeneas desprotegidas o aparatos eléctricos obsoletos unido a la ausencia de mantenimiento de los aparatos se sitúan entre las principales causas de los incendios.
“De los 96 fallecidos de 2018 casi el 60% perdieron la vida a causa de una intoxicación, mientras que el 33% lo hicieron a causa de las quemaduras. Probablemente todas estas muertes hubieran podido evitarse fácilmente si las viviendas dispusieran de detectores y extintores, algo con lo que deberían contar todos los hogares españoles” comentan desde Grupo Fire Madrid.
Los meses más fríos, es decir el período de octubre a marzo concentra más del 69% de las víctimas mortales. Por comunidades, Andalucía se sitúa a la cabeza con 31 fallecidos, seguido de la Comunidad Valenciana con 13, Cataluña con 12 y la Comunidad de Madrid con 10.
La seguridad se ha convertido en una obsesión para muchos en los tiempos que corren, quizás sea momento de apostar fuerte por la seguridad contra incendios para salvar vidas.