La tecnología es sin duda un factor de competitividad enorme en el mercado. La tecnología es una herramienta muy potente que ha transformado sectores económicos por completo. Lo ha hecho desde hace muchos años y lo seguirá haciendo mucho más, más ahora que los avances tecnológicos van llegando cada vez más rápido. Algunos temen que la tecnología acabe suplantando a los empleados y otros están ansiosos por saber cuál serán los trabajos del futuro. A pesar de que es mundo complejo hay cosas más fáciles de comprender de lo que parece. A veces tan solo basta con echar un vistazo al tablón de anuncios de empleo para darnos cuenta de cuáles siguen siendo los sectores clave de nuestra economía. Buscar trabajo en Barcelona sigue siendo un reto para algunos, pero ¿cómo impactará la tecnología en nuestro empleo?
Tecnología y empleo
Sin duda, como hemos dicho, la tecnología es un factor clave. La competitividad de las empresas se ve afectada por la tecnología. Aquellas que quedan al margen de los nuevos desarrollos son las que más dificultades tendrán para sobrevivir y seguir creciendo. Pero la pregunta para muchos es si estos avances tecnológicos generan o no empleos o si por el contrario terminan con la mano de obra.
No es difícil comprender que haya muchas personas que vivan con el miedo de que la tecnología destruya puestos de empleo. Pues en cada revolución o cambio productivo que se ha dado en la historia se ha tenido esta preocupación. Pasó con la revolución industrial y vuelve a pasar hoy. Lo cierto es que las personas siguen y seguirán siendo necesarias. Lo que debemos comprender es que la tecnología cambiará las necesidades de empleo. Cada vez será más necesaria mano de obra dedicada al desarrollo de esta tecnología y quizás menos mano de obra dedicada al sector servicios, por decir alguna cosa.
Aunque, antes de seguir con esta línea de análisis, es importante señalar que un servicio de atención al cliente excelente se basa, precisamente, en la combinación de tecnología y recursos humanos.
Los trabajos del mañana
Por esto, para algunos lo más interesante es conocer cuáles serán los trabajos del mañana, si tenemos en cuenta estos desarrollos tecnológicos. No tenemos muy claro cuáles serán exactamente los trabajos del futuro ni que competencias se requerirán, pero la tendencia nos dice que cada vez necesitamos más mano de obra formada en temas relacionados con la tecnología, como ingeniería, programación, analista de datos, márquetin digital, etc.
Lo que está claro es que la tecnología, al contrario de lo que se dice a veces, ha permitido reducir costes y ha fomentado el empoderamiento de la clase trabajadora. Pensémoslo así, antes era imposible para un trabajador viajar a la otra punta del mundo, pues volar era muy caro. Hoy, los nuevos desarrollos tecnológicos de la aviación han permitido rebajar costes. Y todos podemos coger un avión de vez en cuando.
La tecnología mejora nuestra calidad de vida, nos facilita las cosas y nos ayuda a ser más productiva. La tecnología no acabará con la mano de obra, simplemente generará nuevos perfiles profesionales.