EconomíaPoner en marcha un nuevo negocio nunca es fácil. Primero porque arriesgas parte de tu patrimonio y segundo porque nadie te asegura el éxito por mucho esfuerzo y ganas que le pongas.

Viendo el crecimiento de los autónomos y pymes de los últimos años, el incremento en el autoempleo en momentos de incertidumbre económica es una realidad que ha quedado más que patente. Ante la necesidad de seguir trabajando y la destrucción crónica de empleo, muchos han sido los decididos que han optado por intentar crecer de manera personal y laboral poniendo en marcha proyectos que, posiblemente y en otro momento de mayor estabilidad laboral, se habrían quedado en el tintero.

Sin embargo, no todo es tan idílico como parece. Es necesario tener claro cuáles son todos los pasos y papeles necesarios para evitar posteriormente sorprensas desagradables que puedan estropear un momento que debería ser de ilusión y alegría.

¿Cómo? Pues contando con una asesoría integral contable, financiera e incluso laboral de la mano de profesionales que lleven tiempo ofreciendo servicios de calidad como es el caso de Lliteras & Cía. Gracias a expertos en cada una de las materias, no queda nada sin hacerse o presentarse en tiempo y forma, algo necesario para la tranquilidad del empresario para poder desarrollar la parte de negocio que de verdad le conviene.

El emprendimiento en nuestro país es el que ha permitido volver a situar en el mercado laboral a perfiles más que válidos que, por un momento de crisis económica no sólo nacional sino internacional vivió uno de los peores momentos históricos en lo que a destrucción de empleo se refiere. Por culpa de esto, millones de profesionales acabaron engrosando las listas del paro y viendo cómo, en el corto plazo, las posibilidades de hacerse con un contrato eran prácticamente nulas.

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Sólo por este hecho, miles de personas decidieron apostar por este tipo de autoempleo que les permitiera no dejar atrás su época laboral y no perder más tiempo del necesario en buscar algo que no llegaría sin crearse para ellos. Miles de pymes intentan, cada año, que las cuentas salden de forma positiva. Con una buena asesoría que nos ayude a gestionar los recursos, todo podría ser incluso más sencillo.